Los implantes dentales son ligeramente más susceptibles de sufrir problemas médicos que los dientes naturales.
Por lo tanto, requieren métodos de limpieza y mantenimiento ligeramente diferentes a los del resto de sus dientes.
El cuidado de los implantes afecta en gran medida a la duración de los dientes implantados.
Por lo tanto, un mantenimiento adecuado le ahorrará tiempo, dinero y evitará molestias a largo plazo.
Las personas que se han sometido a un implante dental deben prestar más atención al uso del hilo dental y al cepillado por debajo de la línea de las encías para proteger la estructura ósea que asegura el diente implantado en la boca.
Además, un cepillado diligente y adecuado protege la corona dental, relativamente vulnerable, de astillas y grietas. Los factores del estilo de vida que aumentan la probabilidad de desarrollar astillas y grietas en los dientes también deben evitarse si quiere que sus implantes duren lo máximo posible.
Ahora que ya tenemos lo básico, veamos con más detalle todos estos métodos para cuidar tus dientes implantados:
¿Por qué salen los implantes dentales?
Para entender completamente cómo cuidar mejor los implantes dentales, es importante saber por qué los implantes pueden fallar, romperse o caerse en primer lugar.
Un implante dental bien diseñado y colocado sólo debería salirse por dos razones: o bien la raíz del implante se desprende de la mandíbula o la propia corona del diente se rompe.
Es importante tener en cuenta la diferencia fundamental entre estos dos tipos de daños en los implantes: el primero se debe a un daño en las encías y el hueso que rodean al implante, mientras que el segundo se debe a una debilidad en el propio diente artificial.
Aunque existen otras causas de problemas con los implantes, como las alergias al material del implante, son muy poco frecuentes.
Teniendo esto en cuenta, vamos a ver cómo prevenir estas dos causas principales de pérdida de dientes (implantados).
Evite que su implante se desprenda previniendo las enfermedades de las encías
Si la raíz de un diente implantado se desprende, casi siempre se debe a una enfermedad de las encías (periodontitis) en las encías que rodean al implante.
Las únicas excepciones son si el implante no se ha colocado correctamente o si el cuerpo rechaza el implante como un objeto extraño; en estos casos, el implante suele aflojarse en los primeros días o un par de semanas después de su colocación.
Volviendo a la enfermedad de las encías:
La enfermedad de las encías está causada por las bacterias de la boca que se acumulan en la línea de las encías (el punto en el que las encías envuelven los dientes).
Estas bacterias excretan ácidos que hacen que las encías se retraigan y expongan las raíces de los dientes junto con el hueso que las sostiene.
Durante un largo periodo de tiempo, este ácido puede desgastar el hueso que sostiene los dientes.
Esta es la causa más común de pérdida de dientes.
Dado que la raíz de los implantes dentales se mantienen en su lugar gracias al hueso de la mandíbula, la degeneración de dicho hueso a causa de la enfermedad de las encías puede hacer que la raíz implantada quede menos incrustada en la mandíbula.